La pelota no se mancha
 
En una entrevista realizada por el periodista español Jesús Quintero a Maradona, este le pregunta: “¿Cuándo usted se enteró que era un artista?” Maradona lo observa con cara de tipo bueno, incluso humilde, y le responde: “No lo sé, a mí todo me llegó demasiado pronto”. Quizás esa prontitud sumada a un hombre con una personalidad arrolladora y un talento incomparable dio como resultado el mito de Maradona. Luego están sus adicciones, sus problemas legales, sus líos domésticos, pero él siempre supo regatear las adversidades, así como regateaba en la cancha. 
 
El 10 más grande de la historia que ha dado el fútbol es ilustrado en este libro que usted tiene en sus manos por Chaveztoon, sin duda el mejor caricaturista de Honduras, quien tiene la habilidad de emplear el humor y la inteligencia como solo es capaz de hacerlo un verdadero artista. Maradona, con unas cuantas líneas, es el homenaje a un hombre que fue capaz de enfrentarse al mundo y a él mismo, siempre usando como arma la pelota y su personalidad. 
 
El libro de Chaveztoon retrata con ironía las dos estampas más visibles del genio argentino en 120 caricaturas y, de línea en línea (legales todas), marca las luces y las sombras del “Barrilete cósmico”, del “Pelusa”; amado y odiado de forma visceral casi a partes iguales. Pero hay algo en lo cual, creemos que hay unanimidad: Maradona siempre fue Maradona y este libro no traiciona en ningún trazo la esencia maradoniana. A los genios se les ama o se les odia. Pero Maradona fue más allá, porque fue más amado en vida, de un modo tal como solo se es capaz de amar a un muerto.